Hace unos meses publiqué un par de entradas donde me
detenía en los principales encantos de Sevilla (aquí y aquí), una de las
ciudades más bonitas del sur de España. Y en el tintero se quedaron muchos
lugares que también merecían ser destacados. Por ello, en este artículo voy a
centrarme en los templos religiosos más destacados de la ciudad.
Sevilla es una ciudad que siente mucho la religión y
en cada plazuela existe una iglesia con su correspondiente cofradía. Con el
objeto de no marear al turista voy mostraros los lugares más importantes que
deberíais visitar. ¿Os apetece descubrirlos?
Catedral de Sevilla
Se trata del templo principal de la ciudad y el mayor
que vamos a encontrar en España, pues ocupa 22.000 metros cuadrados. Sus
dimensiones son descomunales: 116 metros de largo, 76 de ancho y 40 de altura.
Su ubicación ocupa el solar donde se levantaba la gran
mezquita musulmana, derruida en 1401. Las obras, iniciadas por Alonso Martínez,
no terminarían hasta el año 1593, por lo que su decoración tiene elementos
renacentistas, platerescos, manieristas, barrocos y neoclásicos. Uno de los
lugares donde vamos a poder esto es en las diversas portadas del exterior, cada
una con un estilo diferente.
No obstante, el elemento más destacado del exterior de
la Catedral es la Giralda, la antigua torre minarete a la que, posteriormente,
se le añadieron varios pisos más para colocar las campanas y el giraldillo,
la escultura que representa la victoria de la fe. Desde lo alto se puede ver
Sevilla en todo su esplendor.
El interior de la catedral es monumental. Posee 5
naves longitudinales de gran tamaño y altura, además de numerosas capillas
laterales insertas en los contrafuertes. Además del impresionante altar mayor,
compuesto por un millar de esculturas que representan escenas del Antiguo y
Nuevo Testamento, otros puntos de interés son la capilla de Virgen de la
Antigua, la tumba de Cristóbal Colón o la imagen de Nuestra Señora de los Reyes
en el Trascoro.
En el siguiente PDF tenéis información detallada de
todos los puntos de interés de la Catedral.
Iglesia Colegial del Divino Salvador
Se trata del segundo templo más importante de la
ciudad y una auténtica joya del barroco español sevillano. Su visita es
imprescindible debido a su magnífico patrimonio artístico, donde destacan la
multitud de retablos escultóricos de gran belleza.
Este templo, como el anterior, se levantó sobre el
solar de una mezquita derruida tras pasar la ciudad a manos cristianas. La
iglesia actual comenzó a levantarse a finales del siglo XVII, siendo finalmente
consagrada en el año 1712.
Lo más destacado de este templo es la riqueza de imágenes
sacras que posee en cada capilla o en el altar mayor, dedicado a la
transfiguración de Cristo.
En el siguiente PDF os dejo los principales puntos de
interés de esta iglesia.
Basílica de la Macarena
Esta es una de las iglesias más famosas de las fiestas
religiosas sevillanas. En 1941 se inició su construcción, siendo consagrada en
1949 para contener las imágenes de la Hermandad de la Macarena, anteriormente
veneradas en el templo de San Gil (destruido en 1936).
Se accede al templo a través de un pórtico con arco y
dintel sustentados por columnas marmóreas, sobre el que se sitúa un
entablamento en el que se sitúa una hornacina que alberga la escultura que
representa la virtud teologal de la Esperanza. Por encima, se levanta airosa la
espadaña, siendo sus colores blancos y amarillos característicos e
inconfundibles.
El interior del templo se configura en torno a una
planta basilical de una sola nave, cubierta con bóveda de cañón y que se
completa con cuatro capillas laterales. El altar mayor de estilo neobarroco alberga
la Virgen de la Esperanza Macarena, una imagen anónima.
En las capillas laterales vamos a encontrar diferentes
imágenes destacables como el Jesús de la Sentencia, la Virgen del Rosario, el Cristo
de la Salvación y las Patronas de Hispanoamérica.
Basílica de Jesús del Gran Poder
Este importante templo sevillano se sitúa en la plaza
de San Lorenzo, muy cerca de la Alameda de Hércules. Pocos son los que conocen
que esta plaza fue el patio de abluciones de una antigua mezquita.
La portada de acceso al templo es inconfundible. De
estilo neobarroco, posee un frontón partido que deja espacio para el escudo de
la hermandad y una espadaña superior con las campanas. El color marmóreo de la
piedra contrasta poderosamente con los colores amarillo y granate del resto del
edificio.
En su interior vamos a descubrir un templo de planta circular
centralizada que lleva nuestra mirada hasta el altar principal con la figura
del Cristo del Gran Poder, una de las imágenes más veneradas de la ciudad.
Esta escultura, durante años, se pensó que fue
realizada por Montañés, aunque hoy en día sabemos con certeza que su autor fue
Juan de Mesa, discípulo del primero y caído en el olvido durante muchos años.
La talla mide 1,81 metros y está realizada en madera de cedro. Ejemplo
magnífico del realismo barroco, su gesto nos muestra la pena y el dolor de
transportar la cruz a cuestas hasta el Calvario.
Iglesia de Santa María Magdalena
A muchos os va a sorprender encontrar aquí este templo
pues no suele aparecer en ninguna guía turística clásica de Sevilla. Y ello, en
mi opinión, es un error, pues este templo barroco esconde una impresionante
decoración interior de frescos y retablos de gran valor.
El exterior de esta iglesia no permite adivinar las
maravillas artísticas que alberga en su interior. Situado en la calle San
Pablo, las portadas son sencillas en cuanto a decoración, destacando la gran espadaña
con campanas situada a los pies del templo.
El interior de esta iglesia consta de tres naves, las
cuales están decoradas profusamente con pinturas en fresco. La cúpula situada
en el crucero está decorada internamente con pinturas temáticas de la Gloria de
la Virgen. El retablo mayor data del siglo XVIII y tiene el honor de ser el
segundo mayor de la ciudad, solo superado por el de la Catedral. Dedicado a San
Pablo, titular del convento situado antiguamente en este lugar, comparte
protagonismo con la escultura de Santa María Magdalena. Además de los numerosos
retablos posee lienzos de Zurbarán y, como indicamos antes, numerosa decoración
pictórica a base de frescos que le otorgan un ambiente espectacular.
Iglesia de San Luis de los Franceses
El último templo que voy a destacar es la Iglesia de
San Luis de los Franceses, edificio levantado por la otrora poderosa Orden de
los Jesuitas. Su orientación, con la puerta principal orientada hacia el este,
provoca que el altar mayor reciba siempre abundante luz del sol.
El exterior está configurado por dos cuerpos y tiene
el aspecto de un retablo encuadrado por dos poderosas torres. Construida alternando
piedra y ladrillo, posee un cuerpo inferior compuesto por arcos y un segundo
superior que contiene cinco ventanas. Su impresionante magnitud parece
contrastar con la estrechez de la calle donde se sitúa y ello se debe a que en
los planes originales los jesuitas concebían la existencia de una plaza frente
al templo desde donde poder admirar esta recargada y barroca portada.
El interior tiene planta de cruz griega con una
poderosa cúpula y unas gráciles columnas salomónicas que simulan sustentarla
(aunque esa función estructural la realizan los pilares ocultos por los
retablos). La decoración de la cúpula posee diversas pinturas al fresco que
muestran escenas del Antiguo y Nuevo Testamento.
Respecto a los retablos, el mayor posee un lienzo de
San Luis de la escuela de Zurbarán, una Inmaculada de Duque Cornejo y un cuadro
de la Virgen con el Niño de estilo manierista y autor anónimo. Luego existen
dos retablos gemelos, uno dedicado a Francisco de Borja y otro a Estanislao
Kostka. Y siendo templo jesuita no podían faltar los retablos dedicados a San
Ignacio de Loyola, a San Francisco Javier, a San Luis Gonzaga y a San Juan
Francisco Regis. La cripta, donde es posible descubrir los procesos
constructivos de este templo, y la capilla doméstica, donde poder trasladarnos
a la vida cotidiana de los noviciados jesuitas, son los dos lugares recónditos
del templo.
Hasta aquí mi listado de templos imprescindibles en toda visita a Sevilla. Seguro que existen muchos más dignos de ver pero, salvo que tengáis mucho tiempo de vacaciones, será imposible abarcarlos todos.
Hasta la próxima.
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