El 18 de enero de 2003 se
declaró Bien de Interés Cultural (BIC) a la espada denominada Tizona, una de
las cuales portó Rodrigo Díaz de Vivar, más conocido por su apodo, el Cid.
El BIC es una figura jurídica
cuyo objetivo principal es proteger el patrimonio histórico español. En
concreto, puede ser declarado un BIC cualquier objeto mueble e inmueble que
pueda tener un interés artístico, histórico, arqueológico, científico, así como
lugares con valores históricos o artísticos, tales como yacimientos
arqueológicos o entornos naturales.
En esencia, este tipo de
legislación permite poder conservar y proteger nuestro patrimonio histórico
cultural. Además, un objeto catalogado como BIC pasa a ser de “domino público”,
lo que significa que la administración es responsable de su conservación y
protección.
Para que un objeto sea
declarado un BIC necesita cumplir una serie se requisitos. Entre ellos se debe
encuadrar en una de estas categorías: tener un valor histórico, artístico,
tipológico, urbanístico, paisajístico o de identidad.
El problema de la Tizona es
que no la podemos encuadrar en ninguna categoría, pues es una falsificación.
¿Qué gobierno declararía como BIC a una falsificación? Descubramos porqué Spain is different.