Se utiliza la frase el canto del cisne cuando queremos referirnos a la última obra o
actuación de un artista justo antes de jubilarse o de morir.
Por ejemplo, la colección póstuma de Franz Schubert se tituló Schwanengesang (El canto del cisne) por este motivo, equiparándola
con, por ejemplo, el Réquiem de Mozart o la Novena Sinfonía de Beethoven.
O en 2015 la Fundación Mapfre de Madrid reunió un
conjunto de obras del Museo D´Orsay en la que reagrupaban las obras de sus
grandes pintores academicistas de finales del siglo XIX. Titulada el canto del
cisne, suponía recordar la última expresión de este arte clásico antes de que
la modernidad acabara con el arte anterior tal y como se conocía entonces.
Pero, ¿de dónde viene esta expresión?; ¿es cierto que
los cisnes cantan antes de morir?