Resulta muy sencillo culpabilizar al pueblo alemán
de numerosos crímenes cometidos durante la Segunda Guerra Mundial. El
Holocausto judío, perpetrado por los nazis en los campos de exterminio, es el
ejemplo más conocido y difundido entre la población actual.
Pero la persecución racial no se limitó a los
campos. También existió durante el avance hacia el este de los ejércitos
alemanes y la acción de los Einsatzgruppen,
auténticos escuadrones de la muerte dedicados a realizar matanzas de judíos,
gitanos y políticos enemigos del nazismo. Casi millón y medio de personas
civiles murieron sin ningún juicio en sus acciones en Polonia, Lituania,
Bielorrusia, Ucrania y parte de Rusia.
Todo esto, de manera más o menos profunda, se suele
conocer entre el público profano. Ahora bien, ¿conoce ese público que pasa de
puntillas por la Historia los crímenes cometidos por los aliados contra los
alemanes? Creo que no demasiado.