Marcos Llorente es un futbolista particular. Entre sus
últimas declaraciones por la red social Instagram tenemos diferentes consejos
que lanza de cuestionable valor científico (por ser amables). Los más polémicos
tratan sobre los chemtrails o sobre los beneficios que otorga el tomar
el sol sin protección. No obstante, uno de los que últimamente ha levantado más
ampollas es el que se refiere a los beneficios de usar lentes con diferentes
filtros.
Ya comenté mi
postura sobre los chemtrails y creo que sobre el melanoma y el cáncer de
piel existen dermatólogos que pueden dar su opinión científica mejor que yo.
Por tanto, voy a detenerme un poco en desmentir el tema de los filtros
amarillos, pues nuestro buen amigo futbolista debe ser que no gana suficiente
dinero y necesita ganar más infundiendo miedo a los profanos en el tema.
¿Os interesa conocer la versión de un experto?
El inicio de la polémica
Toda esta historia comenzó un 9 de octubre con una entrevista
realizada en El Partidazo
de la COPE a Marcos Llorente aprovechando un partido de la selección
española de fútbol. En la misma, el futbolista, que se presentó con unas
llamativas gafas con lentes amarillos, indicaba que utilizaba este tipo de
filtros para interiores y luz roja por la noche. Además, y esto ha pasado más
desapercibido, desaconsejaba el uso de gafas de sol en exteriores. ¿La razón?
Según el futbolista porque no estás dejando que entren al ojo los rayos
necesarios.
Me pregunto qué necesidad tenemos, los adultos, de que
entren en nuestros ojos los rayos ultravioletas (por debajo de 400nm) salvo si
queremos sufrir diferentes problemas oculares, como cataratas, a largo plazo.
En lo alto del Everest le dejaba yo a este vende humos
sin gafas de sol, para que reciba los beneficios de la luz solar plenamente.
Madre mía, lo que tengo que escuchar. Es que me duelen los ojos sólo de pensar
que existan personas que crean estas cosas en pleno siglo XXI. Y máxime
personas con gran repercusión social que tienen seguidores con un juicio
crítico tan escaso como el protagonista de esta historia.
Hace años escribí un artículo sobre los problemas
oculares que genera la exposición solar, aguda y crónica, en nuestros ojos. Os
lo enlazo aquí
por si queréis conocer más sobre el tema con opiniones de profesionales basadas
en estudios científicos serios y comprobados.
El comunicado ¿aclaratorio?
El caso, volviendo al tema de los filtros, es que, recomendar el uso de gafas con filtros amarillos en interiores tuvo bastante rechazo en Internet, por lo que decidió emitir un comunicado. El mismo no tiene desperdicio alguno, por lo que voy a tomarme la molestia de desgranarlo y comentar las partes más jugosas.
Las partes en cursiva se refieren al
comunicado lanzado por Marcos Llorente en la red social Instagram.
Me paso por aquí para aclarar el tema de
las gafas porque veo mucha gente que no entendió nada… o quizás nunca lo hará.
Y está bien. No todos están listos para cuestionar lo que les enseñaron. Si no
te interesa tu salud, puedes seguir deslizando
El primer párrafo es elocuente de lo que una persona
conspiranoica tiene en la cabeza. Nos indica que él tiene una certeza (cuidado
con los poseedores de la verdad absoluta) y que no todo el mundo está preparado
para alcanzar ese estado de conocimiento superior y oculto. Una especie de
nirvana al que nos da acceso de manera gratuita.
Un consejo. La última frase debemos tomarla al revés.
Si no te interesa tu salud, puedes seguir deslizando.
¿Desde cuándo un futbolista es una voz autorizada en
temas de salud ocular?
Nada de lo que comparto me lo invento. No
es una opinión personal. Es biología (la de verdad). Solo hay que leerla. Así que,
si te molesta lo que digo, discútelo con ella.
Vamos a analizar cada frase por separado porque tiene
tela la cosa.
La primera es obvia. Marcos Llorente no es científico
ni investigador ni experto en la materia. Lo tuvo que leer en algún lugar,
claro está.
La segunda se explica al igual que la primera, aunque
al defenderla tan vehementemente la hace suya. Con todo lo que ello implica.
El resto del párrafo es un despropósito: es biología
y, si no te gusta, lo discutes con ella. ¿Con quién? ¿Con el libro de texto? ¿Con
la profesora del instituto?
Yo utilizo gafas con cristales amarillos
(especiales) durante el día cuando estoy en interiores. Y por la noche, si
salgo o estoy expuesto a luces artificiales, uso gafas con cristales rojos.
¿Por qué? Porque protejo mi biología. Porque la luz azul, fuera de su contexto
natural (el día), es un tóxico. Y no lo digo yo, lo dicen tus mitocondrias
cuando dejan de producir energía como deberían.
Aquí ya entramos en harina de otro costal, pues, de
manera falsa y sin pruebas científicas asegura que la luz azul, fuera de su
contexto natural (el día) (¿?) es un tóxico.
Aquí ya estamos metiendo miedo a la gente sin razón,
algo que muchos llevamos tiempo denunciando. Es la vieja polémica que hubo con
los filtros Reticare y que en el blog tenéis bastante literatura al respecto.
Os dejo aquí
la última publicación que hice al respecto.
No existe ningún estudio científico que afirme que la
exposición actual a luces LED es dañina para nuestra retina. Entre otras cosas
porque la transmisión de luz azul de nuestros dispositivos es infinitamente
menor a la que recibimos de la luz solar cada uno de nuestros días.
Es cierto que el componente de luz azul de la luz
solar que recibimos tiene un efecto acumulativo en nuestro organismo y que
acelera cierto envejecimiento celular al crear radicales libres. Pero, de ahí,
a indicar que la luz azul de los dispositivos es dañina y que debemos
protegernos de ella con filtros existe un abismo que la ciencia aún no ha
logrado cruzar.
Os comparto la última publicación que realicé sobre
los filtros de luz azul que evitan parte de esta luz “tóxica” (al igual que un
filtro amarillo) y donde explicaba todo lo anterior con algo más de profundidad
(aquí).
Tu retina y tu piel tienen receptores que
detectan la luz y sus colores. Tu cuerpo la usa para encender o apagar procesos
biológicos esenciales. Si le das una señal equivocada como una pantalla a las
10 de la noche o un foco LED blanco mientras cenas, el cuerpo responde mal.
Punto. No hay debate ahí.
Sí existe debate, cuñadísimo mío. Pues tú mezclas
churras con merinas y te quedas tan pancho. Usar una pantalla por la noche
puede alterar tu sueño, pero más por la atención que estás prestando a la
actividad que estás realizando que a la luz azul emitida por el dispositivo. Y
eso si es un móvil, que lo tienes cerca de los ojos. Si es una televisión a un
par de metros no te digo yo la cantidad de luz azul que recibes.
Y sí, lo más grave lo más grave ocurre por
la noche, cuando alteras tu producción natural de melatonina. Y quizá pensás:
«Bah, melatonina… ¿qué importa?». Bueno, resulta que importa todo. La
melatonina no solo te ayuda a dormir. A continuación, enumera
sus bondades:
- Mantiene el voltaje celular y regula los
canales iónicos de calcio y potasio (cáncer).
- Inhibe el efecto Warburg, es decir, que
con suficiente melatonina, el cáncer no puede proliferar.
- Inhibe la aromatasa, bloqueando rutas
relacionadas con el cáncer de mama.
- Junto con la melanina, es el
antioxidante más potente del cuerpo.
- Es antiinflamatoria y potencia el
sistema inmune.
- Regula tus relojes biológicos.
- Controla los dos programas celulares
clave: autofagia (limpieza celular) y apoptosis (muerte celular programada).
Eso previene el cáncer y enfermedades neurodegenerativas.
La alteración de la luz azul sobre la melatonina y el
sueño es algo que sí que tiene cierta evidencia científica. Demasiada
exposición a la luz azul de las pantallas por la noche puede interrumpir el
ciclo natural de sueño del organismo, conocido como ritmo circadiano.
Pero lo anterior no significa que la luz azul sea
tóxica, ni que necesitemos emplear gafas que la filtren. No es necesario gastar
el dinero en gafas con filtros especiales para usar pantallas LED de
móviles, tablets o laptops. La luz azul de la computadora no provoca
enfermedades oculares. Y es posible mejorar el sueño sin gafas especiales,
simplemente disminuyendo el tiempo que se pasa frente a las pantallas por la
noche y colocando los dispositivos en modo nocturno. El cansancio visual que
provocan los dispositivos digitales no es consecuencia de la luz azul, sino de
la intensidad de la actividad que realizamos con ellos.
No se ha encontrado que la luz azul emitida por los
dispositivos que utilizamos provoque ningún daño celular, ni a nivel
ocular ni en la piel. Por el contrario, sabemos que la exposición sin
protección a la radiación ultravioleta emitida por el sol sí que aumenta el
riesgo de cáncer, en contra de lo que sostiene Marcos Llorente). Y las gafas de sol
que filtran la radiación ultravioleta, durante el día, sí que pueden proteger
la salud ocular, tal como demuestra la ciencia y Marcos Llorente parece obviar.
Tal vez, la diferencia, es que aún no ha sacado una
línea de gafas de sol propia para lucrarse.
Respecto a la melatonina y su relación con el cáncer
indicar que, a día de hoy, no existen evidencias sólidas sobre dosis y efectos
en los pacientes. Si queréis conocer el estado de la cuestión sobre el tema de
la melatonina os dejo esta página para consultar al respecto:
Usar gafas que filtran la luz artificial
no es una moda biohacker. Es una necesidad si vives atrapado en ambientes
modernos, lejos del sol, rodeado de pantallas y luces LED
Este último párrafo es totalmente esclarecedor de las
intenciones reales de Marcos Llorente. Te informa que no es una moda, sino una
necesidad si vives en ambientes modernos (público potencial 100% urbano). Te
está creando la necesidad, después de todo el cuento chino que te puso antes,
para que compres este tipo de filtros.
¿Adivinan dónde pueden comprar estos filtros
amarillos?
La verdad oculta que encierra toda esta
polémica artificial
The
Objective publicó, pocos días después de la
entrevista realizada en El Partidazo de la COPE a Marcos Llorente, una
información esclarecedora sobre las razones ocultas que rodeaban esta polémica.
Lo reproduzco entero:
“Marcos Llorente ha vendido hasta agotar
existencias unas gafas de fototerapia de su propia empresa, Aureo
Lightstyle. Hasta hace unas horas todavía estaban disponibles en la
web por un precio de 199,00 euros, pero ahora lucen un cartel de ‘pre ordenar’
que informa de una próxima nueva tanda de gafas. El modelo en concreto se llama
MarcosMania Día y se encuentra en el grupo de dispositivos de uso personal y
diurno. Se diferencia de otras gafas de la marca por sus cristales
amarillos y su montura de pasta negra. El mismo futbolista las llevaba puestas
en su conversación con Juanma Castaño y pudo explicar sus beneficios y
atributos en directo”.
Por tanto, todo este rollo de los beneficios de los
filtros amarillos ha sido una espectacular campaña de marketing para ganar
dinero de los incautos que se creen cualquier comentario más o menos sesudo de
un personaje famoso.
La versión 2.0 de los filtros RETICARE pero, ahora,
con la dimensión que adquiere un famoso publicitando sus bondades. Y no un
famoso cualquiera, sino uno que se jacta de promover conductas insanas y
leyendas urbanas con la excusa conspiranoica, tan manida últimamente, de la
verdad oculta.
Existen días, sinceramente, en los que el mundo me
decepciona tan profundamente que no se si quiero bajarme o seguir montado.
¿Sirven de algo mis llamadas a la sensatez o la
ignorancia atrevida ha llegado a tal punto que es imposible combatirla?
Qué razón tenía Michel de Montaigne: “El mayor
enemigo de la verdad no es la mentira, sino la ilusión de saber la verdad”.
Marcos Llorente se ve que está ilusionado. El problema
es que, tras él, tiene un montón de seguidores que se ilusionan igualmente y
terminarán sufriendo las consecuencias.
Con los filtros amarillos, afortunadamente, no existe
mayor problema que el de gastarse el dinero. Con otras recomendaciones, como no
usar gafas de sol o tomar el sol sin protección, la cosa se torna más
peligrosa.
Y estos conspiranoicos son los mismos que luego dicen
que son las farmacéuticas las que provocan las enfermedades para lucrarse con
los medicamentos. Tomar el sol sin protección no provoca enfermedades, ¿verdad?
En exteriores no te protejas de la luz solar, que es
muy buena, pero en interiores utiliza filtros amarillos para protegerte de la
emisión mínima de una parte muy pequeña de la luz. Lo dicho, un despropósito.
Hasta la próxima
No hay comentarios:
Publicar un comentario