Los lentes progresivos son, sin lugar a dudas, los
cristales ópticos más avanzados. Su invención, en la segunda mitad del siglo
pasado, supuso un salto cualitativo tan importante en el ámbito de la óptica
como la invención misma de las gafas en la Edad Media.
Desde su invención, los avances técnicos en este
tipo de lentes han sido considerables. Llegando a un punto de personalización
tal que se podría decir que se realizan
a medida del usuario.
Ahora bien, dada la guerra de precios existente en
el sector, se produce una premeditada confusión a la hora de hacer llegar este
tipo de lentes a un público que, ante la falta de conocimiento, deciden escoger
bajo el único criterio del precio.
Con el objetivo de mostrar al gran público las
diferencias básicas entre los principales tipos de progresivos existentes en el
mercado me he animado a escribir este artículo. Espero que os aclare un poco
vuestra elección a la hora de comprar este tipo de artículos.