En esta ocasión vamos a realizar una ruta de senderismo muy cortita y recomendada para todos los públicos que puedan caminar por sí mismos. Nos vamos a San Agustín de Guadalix, una zona preciosa del norte de Madrid a la que se llega muy cómodamente desde cualquier punto de la Comunidad.
En nuestra ruta vamos a recorrer la ribera
del río Guadalix y adentrarnos en un estrecho cañón en donde el agua por donde
la misma se abre camino a pesar de las dificultades orográficas.
¿Os animáis a ver un espectacular salto de
agua?
FICHA
TÉCNICA DE LA RUTA
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Tipo de itinerario: Lineal
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Dificultad: fácil
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Distancia aproximada: 6 km ida y vuelta
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Duración aproximada: unas 2 horas
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Desnivel: + 200 m
•
Material: senderismo
• Época aconsejada: primavera
¿Cómo
llegar?
Un buen lugar para comenzar la ruta es el
área recreativa conocida como Lago de los Patos. En este lugar vamos a poder
aparcar nuestro coche y tener luego unos agradables merenderos donde poder
comer y tener un buen rato de esparcimiento.
Para llegar en coche hasta este lugar
debemos tomar la A-1 dirección Burgos, desviándonos en la salida 36 hacia San
Agustín del Guadalix. En la rotonda, tercera salida y a continuación cruzamos
por debajo la A-1. En la siguiente rotonda, continuamos dirección a San
Agustín, y en la próxima, giramos hasta la última salida, Avenida Madrid.
Avanzamos unos 100 metros y a nuestra izquierda tenemos la entrada al área
recreativa.
Ruta
a la Cascada del Hervidero
El área recreativa de la Laguna de los
Patos es el inicio de nuestra ruta. Una vez aparcado el coche debemos cruzar
una pasarela de madera que nos lleva a una especie de parque infantil con
columpios. A nuestra derecha tenemos el famoso lago, con caseta incluida, en el
que podemos pararnos un poco si logramos ver algún animal.
Tras cruzar la pasarela debemos girar hacia la izquierda |
Sin embargo, nuestro camino nos lleva en dirección opuesta. Por tanto, nada más cruzar la pasarela giraremos a la izquierda para ir bordeando el polígono industrial el Raso, que quedará a nuestra derecha. Al poco de comenzar nuestro recorrido cruzaremos la Avenida de Madrid por los ojos del puente, paralelos al río.
El comienzo del recorrido podemos hacerlo
tanto por un lado del río como por el otro. Yo os recomiendo hacer la ida por
un camino y la vuelta por el otro, por eso de cambiar un poco el paisaje. Por
tanto, si continuáis por mi senda nos colocaremos en la parte opuesta de la
ribera del río una vez que veamos otra
larga pasarela.
Toca ahora recorrer un camino junto al río
en el que en algunas ocasiones iremos rodeados de árboles como chopos o sauces,
mientras que en otras ocasiones tendremos amplios descampados. Aunque veamos
más pasarelas no será el momento de cruzar ninguna.
Siguiendo nuestro camino veremos, llegado
un momento, que el camino se bifurca en tres posibles opciones. La opción más
pegada al río debemos desecharla por ahora (pues la recorreremos en la vuelta).
Y de los dos que suben por nuestra izquierda yo os recomiendo tomar el derecho,
pues es el que nos va a permitir subir lentamente, por un camino a veces
estrecho, pero no demasiado alejado del río. En la lejanía, sobre la sierra,
vemos construcciones del Canal de Isabel II del siglo XIX: una presa y un
molino de agua.
Gracias a ello veremos alguna de las
pequeñas cascadas que posee este curso fluvial, como la cascada Becerra, oculta
entre la frondosa naturaleza de alisos.
Cascada de la Becerra |
Continuemos tras un pequeño descanso
admirando tal cascada. Si avanzamos por la senda junto al río la subida se
realizará por estrechas sendas rodeadas de vegetación. Un auténtico campo a
través que nos llevará, irremediablemente hasta una carretera asfaltada,
antigua carretera de servicio del Canal.
En este momento debemos girar a nuestra
derecha y bajar levemente hasta el puente que cruza el Guadalix y otro salto de
agua (en esta ocasión no me paré a admirarlo), para luego subir por una pista
de tierra bastante pedregosa.
En la subida debemos ir atentos a nuestra
izquierda, pues pasado un sifón perteneciente al Canal de Isabel II se abrirá
un sendero que es el que debemos tomar. No tiene pérdida, pues existe una valla
para que los vehículos no puedan traspasar.
Apenas queda nada, pues estamos a menos de
500 metros del final. Una vez que lleguemos a un puente veremos cómo unas
estrechas escaleras descienden hacia abajo. No se trata de unas escaleras
peligrosas, pero dado que pueden estar húmedas y que no existe barandilla donde
agarrarse es mejor mantener cierta precaución en el descenso. Máxime si se va
con niños.
Nuestro objetivo está delante. Un par de
saltos de agua preciosos y un apacible lugar de esparcimiento en el que comer
un tentempié sentados en un tronco y en el que refrescarse un poco los pies (si
no existen restricciones por COVID) en la charca que se extiende a nuestro
alrededor. Esta agua proviene de la Sierra de la Morcuera.
Cascada del Hervidero |
Tras un breve descanso toca volver.
Nosotros decidimos hacerlo por el mismo camino, aunque variando un poco el
trayecto. Puesto que la última parte de la subida había sido un poco anárquica
decidimos seguir el camino cómodo, aunque al sol, hasta llegar a la cascada de
la Becerra.
Una vez allí bajamos al río y lo fuimos
recorriendo relajadamente junto a su ribera. Cuando yo hice esta excursión era
verano y se agradecía estar a la sombra de la frondosa vegetación que crece
junto al Guadalix. El recorrido, además, tiene el encanto de ser bastante
aventurero y tuvimos que sortear árboles caídos o saltar de piedra a piedra
para evitar zonas embarradas.
Ese camino lo podemos realizar hasta la
pasarela que existe justo antes de llegar a un edificio del canal. Si lo veis
significa que os habéis pasado y debéis retroceder. La pasarela es fácilmente
reconocible, pues obliga a seguir el camino que llevamos una vez que la
atravesamos.
El resto del camino apenas tiene
complicación alguna, llegando fácilmente a la primera pasarela por donde
iniciamos la ruta.
En definitiva, una excursión muy sencilla,
con un entorno natural muy agradable y el encanto de ver unas cascadas, que
siempre son maravillosas.
Resumen ruta en Google Maps:
BONUS TRACK (vuelta circular):
Existe una segunda posibilidad para la
vuelta que supone alargar la ruta unos pocos kilómetros más (calculo que unos 2
o 3). Una vez en la cascada del Hervidero, cuando acabamos de subir las
escaleras, debemos atravesar el viaducto y, justo apenas terminarlo, a nuestra
derecha tenemos una pequeña entrada por la que pasaremos. Tomaremos el sendero
a la izquierda, que nos sube a la casa del lavadero.
Aquí de nuevo otro camino más ancho nos
ascenderá hasta la Almenara de los Castillejos. Iremos a la izquierda para
buscar la vereda del Carril de las Mentiras, donde la encina, la coscoja y el
enebro ocupan todo lo que está fuera de pista. Existe la opción de desviarse un tanto para admirar el bello acueducto de la Retuerta. Aunque prolongamos bastante más la ruta.
Esta vía ancha del denominado Carril de las Mentiras nos dejará en San Agustín
del Guadalix, volviendo al parque de los Patos por la avenida de Madrid.
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