Egipto es uno de los destinos turísticos obligados
para todas aquellas personas interesadas en viajar a los principales lugares históricos
del mundo. Es uno de los viajes que más me sorprendieron y marcaron, pues
además de descubrir monumentos maravillosos tienes la posibilidad de
interactuar con una cultura milenaria llena de particulares idiosincrasias.
En este primer post voy a centrarme en la capital de
Egipto, El Cairo. Una ciudad tan caótica como deslumbrante, tan particular como
cosmopolita, tan sorprendente como tradicional, tan comercial como
hospitalaria. Una ciudad única que a nadie que la visite dejará indiferente.
1. Las
mezquitas de El Cairo
Cuando visitamos un país islámico una de las visitas
obligadas son las mezquitas. Los templos religiosos islámicos nada tienen que
ver con las iglesias cristianas, salvo por su función. Personalmente me encanta
admirar sus soluciones arquitectónicas y
su recargada decoración escultórica. Además de ello, entras en contacto con un
sentir religioso totalmente diferente al occidental, lo que sirve para
valorarlas en su contexto.
A continuación os muestro una pequeña reseña de las
principales que podéis visitar en la ciudad.
Ciudadela
y Mezquita de Mohammed Ali
La ciudadela de Saladino es una de las visitas que
ofrecen todos los guías turísticos. Saladino, conocido por vencer a los
cruzados en Hattin y recuperar Jerusalén para el Islam, fue quién unificó
Oriente Próximo e instauró la dinastía Ayubí en Egipto y Siria.
En la capital egipcia mandó construir, en el siglo
XII, una impresionante ciudadela en lo alto del monte Muzzattam, la cual
incluía su residencia palaciega.
Hoy día, la visita obligada a este conjunto
histórico es la Mezquita de Muhammad Alí, también conocida como de Alabastro.
Construida en el siglo XIX por orden de Mehmet Alí, fue la más grande en su
tiempo. Su magnífica cúpula tiene una altura de 52 metros y 21 metros de
diámetro. El templo se ubica en lo alto de la Ciudadela, razón por la cual es
la mezquita más visible de la ciudad y desde la que se obtienen unas vistas
impresionantes de la misma.
Los que estuvierais en Estambul puede que el
exterior os recuerde al de la Mezquita nueva (Yenicami) de la ciudad turca. Es
normal, pues su arquitecto, YusufBushnak, se inspiró en la de su ciudad natal
para levantar la mezquita de alabastro. Y este sobrenombre viene dado, como
supondréis, por la utilización masiva de esta variedad de yeso en la
construcción.
No obstante, lo más impresionante es la decoración
interior, con la iluminación mágica que ofrecen las múltiples lámparas, las
alfombras persas cubriendo el suelo y la decoración en alabastro, frescos y
mosaicos del interior. Y, por supuesto, la tumba de Mohammed Alí, un sepulcro
de mármol blanco con decoración labrada representando motivos vegetales.
Recorrer la Ciudadela, visitando sus múltiples
museos y mezquitas es otro de lso atractivos si tenéis tiempo suficiente para
ello.
Mezquita
de IbnTulun
Es la mezquita más antigua de la ciudad, pues data
del año 879 d.C. La belleza de esta mezquita radica en la sencillez de su
construcción, a base de ladrillo y piedra. El gran número de arcos y cúpulas
nos remiten al arte oriental. Y el minarete helicoidal, con escalera espiral en
el exterior, es una copia bastante fidedigna del de la Mezquita de Samarra
(Iraq).
Destacar el enorme patio cuadrangular (no en vano es
la mezquita más extensa de la ciudad en superficie), rodeado de pórticos y
arquerías, y con una monumental fuente central.
El mihrab de la mezquita de Ibn-Tulun está en parte
reconstruido, pero mantiene elementos originales como el arco, los soportes y
la configuración en general.
Sin duda fue una de las visitas que más me gustó,
pues es una mezquita con un agradable aroma tradicional en la que las masas de
turistas suelen escasear.
Mezquita
Madraza Sultán Hassan
Esta mezquita, muy próxima a la Ciudadela, al igual
que la de IbnTulun, es otra de las visitas obligadas. Data de mediados del
siglo XIV y entre sus originalidades constructivas está el particular diseño
para albergar las cuatro escuelas de pensamiento sunita.
Se trata de una de las mezquitas más grandes del
mundo y ya la entrada al complejo, a través de un portal profusamente decorado,
resulta sobrecogedora. El patio es inmenso, con la típica fuente central para
las abluciones, y en los cuatro lados en forma de cruz se sitúan otros tantos
liwans abovedados (salas para sentarse), lámparas colgando de cadenas y bordes
rojos y negros. Cada liwan está dedicado a una de las cuatro escuelas de
jurisprudencia sunita y posee una madraza independiente en su parte posterior.
Su interior, bellamente decorado, y el mausoleo del
sultán son dos de los puntos de interés de este complejo que no debéis olvidar
visitar.
Mezquita
Al-Azhar
Muy próxima al Bazar de Khan Al-Khalili, esta
mezquita se considera el templo nacional del país. Además fue concebida como
centro de enseñanza y se considera la universidad más antigua del mundo en la
cual se ha enseñado ininterrumpidamente desde su fundación, en el siglo X.
En su interior no encontraréis una belleza especial
que encubra a otras mezquitas, pero si un ambiente estudiantil muy
característico. Una visita imprescindible por ser uno de los centros culturales
más importantes del Islam actual.
2. Bazar
Khan Al-Khalili
El otro gran atractivo turístico de El Cairo, en lo
que a la parte islámica se refiere, es el centro comercial más grande de la
ciudad.
Además del caótico ambiente y el alboroto constante
de vendedores y clientes, lo que más me sorprendió es la habilidad innata de
aquellos para conocer tu idioma. Algunos prueban varios, pero la mayoría
aciertan a la primera: “¿espaniola, espaniola? hola hola Coca-Cola. Nada, nada,
limonada”.
Personalmente no me gusta regatear ni que me lancen
encima camisetas, te intenten llevar a su puesto callejero o te embauquen para
venderte cualquier souvenir inútil. Si logran meterte en su tienda y sentarte a
tomar un te prepárate para comprar algo que, aunque regatees, siempre será más
caro de lo debido. Entre otras cosas porque regatear es un arte y ellos son
unos consumados artistas.
Tal vez por ello muchos turistas españoles buscamos
la famosa tienda de Jordi, un lugar en donde cada cosa tiene su precio y no es
necesario regatear. Si preguntas por ella alguien te llevará (a cambio de una
pequeña propina).
Perderse en este bazar es muy sencillo si no tienes sentido de la orientación. Y, aun así, tampoco resulta fácil ir dónde quieres. Os aconsejo entrar por las calles principales y tomarlas como referencia, retrocediendo por el mismo camino si nos alejamos mucho de ellas.
Otro lugar característico es el Café Fishawi,
popularmente conocido como de los Espejos por la multitud de ellos que existen
en su interior. Un sitio ideal para relajarse del caótico exterior mercantil.
3. Barrio
Copto con Iglesia Colgante
El barrio Qasr al-Sham era la zona de la ciudad en
la que vivían los cristianos egipcios cuando los musulmanes tomaron la ciudad.
Hoy día sigue siendo un barrio cristiano, equivaliendo el término copto a
cristiano ortodoxo.
Según el Evangelio, en esta zona de la ciudad de El
Cairo fue donde vivió la Sagrada Familia en su exilio a Egipto, por lo que las
calles del barrio copto están llenas de trascendencia para cristianos y judíos.
Yo tuve la “suerte” de visitar el barrio al
anochecer, cuando ya los turistas abandonaron la zona hacía tiempo. Tuve de
guía a un simpático taxista que me explicó los principales atractivos del
barrio chapurreando inglés y castellano. Poder visitar la zona con las luces de
las farolas resulta algo mágico.
Las iglesias coptas, en donde sobresale la famosa
Iglesia Colgante, con su escalinata al entrar, o la de San Jorge, con su
magnífico icono motivo de peregrinación, son los típicos templos de decoración
abigarrada en su interior que podéis ver, por ejemplo, en Atenas.
El museo de Arte Copto alberga, entre otras joyas,
los célebres Manuscritos de NagHammadi (de los siglos III-IV), objetos de
marfil, papiros o piezas de arquitectura.
Los judíos tienen también en este barrio su templo
principal, la Sinagoga Ben Ezra (también llamada Sinagoga El-Geniza), que data
del siglo XIX. Según la tradición, está edificada el lugar donde fue encontrado
Moisés de bebé.
Otro atractivo de El Cairo más antiguo es la conocida Ciudad de los muertos (Qarafa).
Se trata de un enorme cementerio, situado en la zona este de El Cairo, en
donde mucha gente ha realizado su vivienda en las tumbas. A cambio de cuidar el
mausoleo, la familia les permite residir entre los muertos. Pocos guías se
ofrecerán a llevaros a este lugar, pues resulta bastante peligroso para el
turista occidental. Con suerte os dejarán ver una pequeña zona y siempre con
las mayor de las urgencias.
Aunque turísticamente tiene poco atractivo sí que es
un lugar en donde poder plantearse lo injusta que puede llegar a ser la vida
según el lugar en el cual nacemos.
4. Museo
Egipcio
Todos los que visitan por primera vez este museo
tienen la misma sensación de entrar en una especie de almacén caótico:
múltiples tesoros arqueológicos se disponen, sin un orden aparente, en las
vastas salas del edificio situado en la famosa Plaza Tahrir.
No obstante, no todo es tan desorganizado como
parece. Por ejemplo, la zona en la cual se exponen los tesoros de la tumba de
Tutankamón está perfectamente delimitada y ordenada.
Además, ese caos permite descubrir el museo lejos de
mapas y planos que tantas veces nos acompañan en los museos. Es un fastidio
para aquellos que sólo desean ver las piezas “maestras” e irse a tomar un te o
fumar en pipa de agua. Pero para aquellos a los que les gustan las piezas
artísticas es una experiencia muy agradable deambular por el museo y
encontrarse de golpe con una de esas piezas que estás harto de ver en los
libros de texto. Por tanto, mi recomendación es prepararse de antemano la
visita y dejarse envolver por el ambiente del museo.
Entre los objetos imprescindibles, a mi modo de ver,
estaría el Tesoro de Tutankamón, con
su famosa máscara funeraria; la Paleta de
Narmer, primera mención a una unificación del Antiguo Egipto por parte del
faraón Narmer, fundador de la I dinastía; El
Alcalde del Pueblo, escultura de madera e incrustaciones hallada en la
mastaba de Kaaper en Saqqara; la Estatua
sedente de Kefrén, hallada en el Templo del Valle de la Necrópolis de
Guiza; La Estatua sedente de Zoser,
realizada en piedra caliza, rey de la Dinastía III (2665-2645 a.C.); Las Estatuas del príncipe Rahotep y su esposa
Nofret. Realizada en piedra caliza y pintada. Dinastía IV, reinado de
Snefru (2614-2579 aC.); La Triada de
Micerino(Menkaura), hijo de Kefrén y nieto de Keops. Realizada en esquisto
gris verdoso. Imperio Antiguo. IV Dinastía (2514-2486 a.C).El faraón esta
flanqueado por Hator y por la diosa del nomo de Cinópolis, ambas lo toman por
el brazo; El Escriba sentado,
realizado en caliza pintada.Sakkara. Dinastía V, hacia 2.450 a.C.; la
impresionante Cabeza de Hatshepsut,realizada
en piedra caliza pintada. Templo funerario deDeir-el-Bahari. Dinastía XVIII;
todo lo referente al faraón Akhenatón
(esculturas y relieves); la colección de retratos
fúnebres pintados en madera, de época romana; y, por supuesto, las momias, con especial mención a la de
Hatshepsut y Ramsés (¡no asustarse si vuelve a levantar el brazo!).
Para una planificación
de la visita y un primer vistazo virtual del mismo os dejo este interesante
enlace: http://www.egiptoaldescubierto.com/?dest=/museos/elcairo/elcairo.html
5. Alrededores
de El Cairo
Pirámides
de Giza
Visitar las Pirámides de Giza es una de las mejores
experiencias que puedes tener de tu visita a El Cairo. Se trata de una de las
grandes maravillas del mundo, de esos lugares mágicos que impresionan y
acongojan cuando los recorres.
La primera pirámide que encontrarás tras entrar en
el complejo es la gran pirámide de Keops,
la más grande de las tres. Seguro que cuando os acerquéis a ella os sorprenderá
el tamaño de los sillares de piedra y la perfección de la construcción (existe
una diferencia máxima de 4 cm entre los cuatro lados, los cuales miden 230
metros). Se utilizaron más de dos millones de sillares y su altura no se
superó, en una construcción humana, hasta el siglo XIX. A su lado está el Museo
del barco Solar, cuyo precio excesivo desaconseja la visita.
La pirámide de
Kefrén la reconoceréis por tener en la parte superior un trozo del
recubrimiento de caliza que poseían las pirámides originalmente. Por cierto,
que entrar en las pirámides, además de suponer un sobrecoste, no tienen ningún
interés artístico. Si habéis estado en el Valle de los Reyes el interior de las
pirámides os decepcionará, pues no poseen decoración pictórica. No obstante,
como experiencia de estar bajo toneladas de piedras, puede resultar curiosa la
visita. Si debo elegir una visitaría Keops.
La pirámide de
Micerinos es la más pequeña de las tres y su interior igual de insulso que
las anteriores. En una de sus caras tiene una gran grieta, huella de cuando
intentaron desmontarla en la Edad Media. Como es lógico, cejaron en su empeño
viendo lo poco que avanzaba el proceso.
Otro punto interesante de la visita a las pirámides
es acercarse a una especie de mirador (necesitarás taxi) desde donde admirar el
conjunto de las tres pirámides. Es una visión que merece mucho la pena y de las
que no se olvidan en la vida.
Y, por último, la Gran Esfinge de Giza. Al principio, os parecerá pequeña. Es una
sensación normal tras visitar las pirámides. Pero luego, tras un rato
admirándola, sabréis apreciarla en su justa medida. La aglomeración de turistas
que se arremolinan junto a la esfinge desvirtúa un poco la visita. En realidad
son los mismos que en las pirámides, pero con menos sitio de esparcimiento.
Por último advertiros que durante toda la visita se
os acercarán supuestos guías para explicaros el conjunto, cuidadores de
camellos para dar una vuelta, vendedores ambulantes, personas que se ofrecerán
a sacaros una foto… Todo bajo la posterior propina correspondiente. A gusto del
consumidor.
Pirámide
de Saqqara
Saqqara era la necrópolis principal del Imperio
egipcio Antiguo, cuando la capital era Menfis. Su visita es, en mi opinión,
obligada, pues posee el germen de las pirámides. Me refiero a la Pirámide escalonada de Zoser.
Fue construida por el sacerdote del faraón, el
genial Imhotep, quién desarrolló un nuevo tipo de enterramiento a base de la
unión de diferentes mastabas, la anterior tumba en la que se guardaban los
restos de los faraones y personas importantes.
Además de ser el germen desde el cual se iniciaría
la carrera constructiva de las pirámides en Egipto, la tumba de Zoser fue el
primer edificio funerario realizado en piedra (antes se utilizaba el adobe). La
intención de durabilidad de la construcción la tenemos confirmada en el hecho
de que la necrópolis de Zoser se conserva bastante bien, mientras que nada
queda de las casa en adobe en las cuales vivían los egipcios de la época
(incluido el palacio de Zoser).
Muy próximo al recinto de Saqqara se encuentra la
mastaba Kagenmi, un funcionario importante en el reinado del faraón Teti, el
primero de la VI dinastía. Lo más sorprendente de esta mastaba es su abundante
decoración, la cual ocupa ocho salas y cinco antecámaras. En la decoración de
las paredes, a base de relieves policromados, podréis observar la particular
forma que tenían los egipcios de plasmar sus actividades cotidianas. Como
seguro que sabéis estas decoraciones no eran un mero asunto artístico, sino que
estaban ideadas para que al difunto no le faltara de nada en el más allá. Ni
comida, ni sirvientes que le agasajaran.
Y hasta aquí mis visitas imprescindibles a los principales atractivos turísticos de la ciudad. Para terminar os dejo un consejo práctico. Aunque en los viajes guiados os recomendarán contratar con ellos las excursiones yo no os lo aconsejo, pues el sobrecoste de precio que te exigen me parece excesivo. Visitar todos los monumentos de El Cairo es posible en Taxi. Y en muchas ocasiones puedes ir andando entre monumentos próximos con total seguridad (siempre siguiendo calles principales). Si lográis encontrar un taxista que hable vuestro idioma seguro que visitaréis El Cairo de forma barata y edificante, pues muchos de ellos suelen hacer también las veces de guías turísticos o conocen a una persona que les ayuda en esa labor.
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